No dices dónde está tu jardín.
Porque la hierba no crece igual en verano en zonas mediterráneas que atlánticas.
Y tampoco en invierno crece en igual medida, así que tendrás que pensar qué dar de comer a tus animales en esa época.
Cuenta también con que, sean cabras u ovejas, no podrás tener flores o plantas ornamentales porque se las van a zampar.
Las cabras también se comerán la corteza de los árboles.
Y según qué raza de ovejas, idem.
Piensa también en sus necesidades de beber agua, si no hay rocío cada mañana (incluso en verano, como ocurre en la franja cantábrica).
Y tendrás que hacerles un caseto o refugio, aunque apenas lo usen (imperativo legal, por temas de bienestar animal, ya ves...).
Seguramente vas a tener que sacar una cartilla de ganadero y te van a marear con vacunas, revisiones y demás controles, pero es lo que hay.
Si tienes ovejas, las tendrás que esquilar, y no es tarea baladí, y menos si son semisalvajes como las que yo tenía.
También tendrás que dividir tu terreno en dos o tres parcelas y rotar los animales, porque si no, llegará un día en que esté todo medio comido y medio pisado, y no tendrás más remedio que llevarles alfalfa.
Rotando a los animales en tres zonas evitas también que tengan parásitos intestinales por pastar constantemente en la misma zona en la que hacen sus necesidades.
Ah, finalmente, si la hierba está muy alta, las ovejas no la pastarán. Les gustan los tallos tiernos, no los altos, duros y leñosos.