Pues sí, con empeño y paciencia se consiguen cosas de éstas y más, en muchas disciplinas.
Howard Hill fue un famoso arquero que vivía, de hecho, de dar espectáculos en los años 50 que hacía tiros de estos, espectaculares.
Pero hay que tener en cuenta también que para grabar uno de estos tiros quizá haya que grabar diez o veinte veces antes de que la toma buena, en la que acierta, se suba al video.
Sorprendente, en cualquier caso.
A mí me recuerdan a los fakires, que se cosen los ojos, tragan sables y cosas así.